En esto del Carnaval pasa como con el fútbol: todos somos jurado y todos somos entrenadores. En el baño de criterios dispares, la última palabra la tiene el jurado y, para no perder la costumbre, emitieron un veredicto en el que se colaron agrupaciones con las que nadie contaba, especialmente en chirigotas, y en la que quedaron fuera propuestas de alta calidad, especialmente en la modalidad de la comparsa donde la calidad ha prevalecido más que en la chirigota. Y el cuarteto, pese a un buen pase de semifinales, finiquitado. Llama la atención que ‘Nada por aquí, nada por allí’, una chirigota completa la mires por donde la mires se haya quedado fuera, y que esté en la final ‘Los consejeros del señor presidente’. Y en comparsas, todas (casi) las que están en la final se lo merecen, pero dejar fuera a ‘Los Artistas’ y ‘La panda de los pulgosos’ es un atentado contra el buen gusto musical. Pero el jurado es soberano, se adaptan a unas bases en las que falta rigor, especialización y criterio, y, al final, los cuchillos mal afilados acaban cortando indiscriminadamente.
Nada por aquí, nada por allí
Cajonazo se mire por donde se mire. La estructura casi perfecta de todo su repertorio, las grandes voces, la musicalidad de sus pasodobles, el respeto al tipo, la calidad del verso y la buena interpretación no ha bastado para que esta pedazo de chirigota sevillana disfrute de la final en Huelva.
Los asesinos en serio
Mucho mejor que en preliminares, esta chirigota onubense supo defender dos pasodobles buenos en los que destaca el compás musical, dos cuplés actuales y con buenos puntos, y un popurrí bien estructurado. Disfrutaron sobre el escenario y eso se notó en la buena ejecución de la actuación.
Los consejeros del señor presidente
Grupo experimentado que, sin nada que destaque especialmente, ha logrado colarse en la final. Defienden el tipo de principio a fin, adaptan sus voces a la seriedad del personaje, cantan compactos al ritmo de un soniquete muy chirigotero, y defienden el popurrí dignamente. Finalista.
El marqués de pacotilla
Ojo con este grupo para ediciones venideras. Comparsa joven, pero sobradamente preparada. Voces muy bien trabajadas en afinación y vocalización para defender un repertorio musicalmente bello en el que los integrantes supieron llenar el escenario, dar el paso adelante y salir ovacionados.
El rincón de los elegidos
Los que juzgan aún no están preparados para aceptar propuestas que revolucionen la modalidad. Otra lección de ritmo de una agrupación que defendió dos pasodobles impresionantes en la composición de letra, y que en el popurrí volvió a derrochar energía. No les ha valido para ser finalistas.
La herencia
Pese a que el público se divirtió, su estribillo fue coreado en diferentes ocasiones, su parodia supo engarzar buenas rimas cuarteteras, y su modalidad agoniza por la falta de valientes que la defiendan, el jurado consideró que, otro año más, no haya ningún cuarteto en la final del colombino.
Cajonazos
Navajazo a la música excluyendo a ‘Los Artistas’. Si la inteligencia musical, la interpretación, los matices de voces, la fuerza en el verso y el ritmo no se valoran en este concurso, mala pinta tiene esto. La final se queda sin Bollullos.
¿Qué criterio seguirá el jurado para no apreciar la alta calidad de todo lo hecho por ‘La panda de los pulgosos? Queda claro que la competencia en comparsas hacía muy difícil la decisión final, pero la agrupación ayamontina de Pedro Suárez hizo todo en los dos pases para tener hueco, desde un tipo espectacular, pasando por un ritmo musical sin titubeos y un montaje de voces grandioso. Pues no ha sido suficiente.
Las niñas de la curva se quedan tiradas en el corte. Ha gustado en sus dos pases por méritos propios. Parecía claro que tendrían hueco en la final, pero el jurado ha considerado que hay otras agrupaciones, más simples y peor cantadas, que lo merecían antes que esta chirigota de Punta Umbría. Como dice aquél, cada uno tiene sus gustos...
Nada por aquí, nada por allí
Cajonazo se mire por donde se mire. La estructura casi perfecta de todo su repertorio, las grandes voces, la musicalidad de sus pasodobles, el respeto al tipo, la calidad del verso y la buena interpretación no ha bastado para que esta pedazo de chirigota sevillana disfrute de la final en Huelva.
Los asesinos en serio
Mucho mejor que en preliminares, esta chirigota onubense supo defender dos pasodobles buenos en los que destaca el compás musical, dos cuplés actuales y con buenos puntos, y un popurrí bien estructurado. Disfrutaron sobre el escenario y eso se notó en la buena ejecución de la actuación.
Los consejeros del señor presidente
Grupo experimentado que, sin nada que destaque especialmente, ha logrado colarse en la final. Defienden el tipo de principio a fin, adaptan sus voces a la seriedad del personaje, cantan compactos al ritmo de un soniquete muy chirigotero, y defienden el popurrí dignamente. Finalista.
El marqués de pacotilla
Ojo con este grupo para ediciones venideras. Comparsa joven, pero sobradamente preparada. Voces muy bien trabajadas en afinación y vocalización para defender un repertorio musicalmente bello en el que los integrantes supieron llenar el escenario, dar el paso adelante y salir ovacionados.
El rincón de los elegidos
Los que juzgan aún no están preparados para aceptar propuestas que revolucionen la modalidad. Otra lección de ritmo de una agrupación que defendió dos pasodobles impresionantes en la composición de letra, y que en el popurrí volvió a derrochar energía. No les ha valido para ser finalistas.
La herencia
Pese a que el público se divirtió, su estribillo fue coreado en diferentes ocasiones, su parodia supo engarzar buenas rimas cuarteteras, y su modalidad agoniza por la falta de valientes que la defiendan, el jurado consideró que, otro año más, no haya ningún cuarteto en la final del colombino.
Cajonazos
Navajazo a la música excluyendo a ‘Los Artistas’. Si la inteligencia musical, la interpretación, los matices de voces, la fuerza en el verso y el ritmo no se valoran en este concurso, mala pinta tiene esto. La final se queda sin Bollullos.
¿Qué criterio seguirá el jurado para no apreciar la alta calidad de todo lo hecho por ‘La panda de los pulgosos? Queda claro que la competencia en comparsas hacía muy difícil la decisión final, pero la agrupación ayamontina de Pedro Suárez hizo todo en los dos pases para tener hueco, desde un tipo espectacular, pasando por un ritmo musical sin titubeos y un montaje de voces grandioso. Pues no ha sido suficiente.
Las niñas de la curva se quedan tiradas en el corte. Ha gustado en sus dos pases por méritos propios. Parecía claro que tendrían hueco en la final, pero el jurado ha considerado que hay otras agrupaciones, más simples y peor cantadas, que lo merecían antes que esta chirigota de Punta Umbría. Como dice aquél, cada uno tiene sus gustos...
VIVA HUELVA
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