9 de febrero de 2010

Ventajas e inconvenientes del buen autor


Ser un autor consagrado y tener un grupo con posibilidades, tiene ventajas e inconvenientes en este vendito carnaval. Si eres del montón, casi, ni se te tiene en cuenta. Para bien o para mal; eres el resultante de la elite y la mediocridad, y estar en esta línea, te hace mantenerte al margen de las posibles críticas, tanto para lo bueno, como para las fijaciones ineptas de los carroñeros ambulantes, que danzan a la caza de críticas para llenar las absurdas conversaciones de derribo, en las lindes del Teatro.

Un error que suele comenter muchos entendidos. Es triste, ver como despellejan las notas de algunos grupos, corrompiendo el alma de cada letra, que a veces, por incultura, ni se llegan a entender. Pero eso es lo de menos, lo importante no es saber, es dar la imagen, de que uno sabe de lo que habla, mientras se avinagran las gargantas con pamplinas y desprecios, que van cambiando de color, dependiendo de quienes los oyen. Pero da la sensación, que todo este embrollo del que os hablo, no son más que tretas y malas artimañas de algunos fanáticos, que van tejiendo redes, alrededor de sus fantásticos grupos, sin importarles el daño que puedan crear. Muy señores míos, en las barras no se puntúan a los grupos, se valoran, se dan opiniones personales y a veces, sin nigùn tipo de argumento, y por supuesto, en las barras no está el escenario y jamás se abren las bambalinas. Más disfraces entre las butacas y aprovechen vuestras creativas criticas para subirse a las tablas.


O.I.

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