La semifinal del concurso, que se desarrollará hasta el 9 de febrero, comienza con agrupaciones de Cádiz, Sevilla y Huelva · La comparsa de Bollullos dedica uno de sus pasodobles al soldado muerto en Afganistán.
Las veladas carnavaleras vuelven al Gran Teatro, tras un paréntesis de tres días, con la semifinal del Concurso Interprovincial del Carnaval Colombino, que se desarrollará hasta el próximo 9 de febrero. La segunda fase del certamen comenzó ayer con una jornada protagonizada por agrupaciones de Cádiz, Sevilla y Huelva, en dos modalidades: comparsas y murgas.
La sesión, que contó con una gran asistencia de público, se inició con una comparsa gaditana, La libertad dormida, agrupación del hijo de Enrique Villegas, que ha conseguido en el año de su presentación en Huelva hacerse un hueco entre las semifinalistas. Dirigida por José Cruz, con letra y música de Juan Miguel y Alejandro Villegas, dedicó uno de sus pasodobles a Andalucía. Los componentes de la comparsa realizaron un recorrido por las ocho provincias andaluzas, subrayando su "orgullo de ser andaluz".
El grupo demostró su elegancia en el escenario durante su actuación, que destacó por sus bonitos juegos de voces, afinadas, armoniosas y acompasadas.
En uno de sus cuplés recordaron la agresión a Silvio Berlusconi, cuando el presidente italiano fue golpeado en la cara con una estatuilla.
En su popurrí, alusiones a la crisis y a la situación española, "si nada más que tengo deberes para que quiero Gobierno y Constitución".
Como presentador intervino en esta ocasión, Andrés Pérez, que pidió un aplauso para el jurado del concurso, "por mantener el tipo". Asimismo, felicitó a Rafael Ramos, director de la murga, Así somos yo (los esquizofrénicos), de Huelva, que está en cuartos de final en el certamen del Carnaval de Cádiz.
El presentador aconsejó a las agrupaciones semifinalistas que "echen toda la carne en el asador", ya que "está la cosa difícil", en relación al pase a la gran final. Ya se han agotado las entradas para la final del concurso de las carnestolendas onubenses, que se celebrará el próximo 11 de febrero.
La primera noche de semifinales prosiguió con los segundos premios de 2009 en la categoría de murga y comparsa, Una chirigota con interés de Punta Umbría, que se alzó con el galardón en la pasada edición con Una chirigota en trance, y la comparsa La casa de los espejos, de Bollullos Par del Condado, que participó el pasado año con El jardín de los sentidos.
En primer lugar intervino la murga puntaumbrieña, bajo la dirección de José Carrasco, autor de la música y coautor de la letra con Francisco Manuel Contreras. Con la agrupación llegaron las primeras risas de la noche. Sus componentes, tal y como se presentaron, van de cubanos que encuentran en mujeres octogenarias su seguro de vida en España, "mira que pareja hacemos una vieja y un mulato". Los murguistas, que no pararon de bailar al ritmo de su música, tuvieron letras de condena para los pederastas, para los aficionados al turismo sexual, "hay que ser un mal nacido para abusar de este tipo de muchachas... menores que se venden sólo para poder comer".
Tras la murga de Punta Umbría, subió a las tablas del Gran Teatro la comparsa La casa de los espejos, de Bollullos, que ha conseguido mantener su posición en los dos últimos años y aspira a hacerse en esta edición con el primer premio. Dirigida por Antonio J. Arias, con letra de Daniel Camacho, coautor de la música junto a Arias, volvió a mostrar su arte sobre el escenario: buena puesta en escena, potentes voces y letras críticas y directas.
El primero de sus pasodobles fue un homenaje a las amas de casa, para las miles de mujeres que se dedican a lo que antiguamente denominaban sus labores, para todas ellas que "trabajan a cambio de nada".
El segundo pasodoble estuvo dedicado al soldado español, que "luchando por la paz perdió la vida en Afganistán", en referencia a John Felipe Romero, muerto el pasado lunes en un ataque talibán. La comparsa subrayó que "de misión humanitaria no fue allí ni un sólo hombre", por lo que pidió al Gobierno que "diga las cosas por su nombre".
Asimismo, la comparsa de Bollullos exigió al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, que "cumpla sus promesas, que fue el primero en gritar: No a la guerra".
La velada carnavalera continuó con la comparsa Porque digo la verdad, de Punta Umbría; la murga ¡Ojú que cabeza tengo!, de San José de la Rinconada (Sevilla), y la comparsa Alma de tierra, de Riotinto.
Las veladas carnavaleras vuelven al Gran Teatro, tras un paréntesis de tres días, con la semifinal del Concurso Interprovincial del Carnaval Colombino, que se desarrollará hasta el próximo 9 de febrero. La segunda fase del certamen comenzó ayer con una jornada protagonizada por agrupaciones de Cádiz, Sevilla y Huelva, en dos modalidades: comparsas y murgas.
La sesión, que contó con una gran asistencia de público, se inició con una comparsa gaditana, La libertad dormida, agrupación del hijo de Enrique Villegas, que ha conseguido en el año de su presentación en Huelva hacerse un hueco entre las semifinalistas. Dirigida por José Cruz, con letra y música de Juan Miguel y Alejandro Villegas, dedicó uno de sus pasodobles a Andalucía. Los componentes de la comparsa realizaron un recorrido por las ocho provincias andaluzas, subrayando su "orgullo de ser andaluz".
El grupo demostró su elegancia en el escenario durante su actuación, que destacó por sus bonitos juegos de voces, afinadas, armoniosas y acompasadas.
En uno de sus cuplés recordaron la agresión a Silvio Berlusconi, cuando el presidente italiano fue golpeado en la cara con una estatuilla.
En su popurrí, alusiones a la crisis y a la situación española, "si nada más que tengo deberes para que quiero Gobierno y Constitución".
Como presentador intervino en esta ocasión, Andrés Pérez, que pidió un aplauso para el jurado del concurso, "por mantener el tipo". Asimismo, felicitó a Rafael Ramos, director de la murga, Así somos yo (los esquizofrénicos), de Huelva, que está en cuartos de final en el certamen del Carnaval de Cádiz.
El presentador aconsejó a las agrupaciones semifinalistas que "echen toda la carne en el asador", ya que "está la cosa difícil", en relación al pase a la gran final. Ya se han agotado las entradas para la final del concurso de las carnestolendas onubenses, que se celebrará el próximo 11 de febrero.
La primera noche de semifinales prosiguió con los segundos premios de 2009 en la categoría de murga y comparsa, Una chirigota con interés de Punta Umbría, que se alzó con el galardón en la pasada edición con Una chirigota en trance, y la comparsa La casa de los espejos, de Bollullos Par del Condado, que participó el pasado año con El jardín de los sentidos.
En primer lugar intervino la murga puntaumbrieña, bajo la dirección de José Carrasco, autor de la música y coautor de la letra con Francisco Manuel Contreras. Con la agrupación llegaron las primeras risas de la noche. Sus componentes, tal y como se presentaron, van de cubanos que encuentran en mujeres octogenarias su seguro de vida en España, "mira que pareja hacemos una vieja y un mulato". Los murguistas, que no pararon de bailar al ritmo de su música, tuvieron letras de condena para los pederastas, para los aficionados al turismo sexual, "hay que ser un mal nacido para abusar de este tipo de muchachas... menores que se venden sólo para poder comer".
Tras la murga de Punta Umbría, subió a las tablas del Gran Teatro la comparsa La casa de los espejos, de Bollullos, que ha conseguido mantener su posición en los dos últimos años y aspira a hacerse en esta edición con el primer premio. Dirigida por Antonio J. Arias, con letra de Daniel Camacho, coautor de la música junto a Arias, volvió a mostrar su arte sobre el escenario: buena puesta en escena, potentes voces y letras críticas y directas.
El primero de sus pasodobles fue un homenaje a las amas de casa, para las miles de mujeres que se dedican a lo que antiguamente denominaban sus labores, para todas ellas que "trabajan a cambio de nada".
El segundo pasodoble estuvo dedicado al soldado español, que "luchando por la paz perdió la vida en Afganistán", en referencia a John Felipe Romero, muerto el pasado lunes en un ataque talibán. La comparsa subrayó que "de misión humanitaria no fue allí ni un sólo hombre", por lo que pidió al Gobierno que "diga las cosas por su nombre".
Asimismo, la comparsa de Bollullos exigió al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, que "cumpla sus promesas, que fue el primero en gritar: No a la guerra".
La velada carnavalera continuó con la comparsa Porque digo la verdad, de Punta Umbría; la murga ¡Ojú que cabeza tengo!, de San José de la Rinconada (Sevilla), y la comparsa Alma de tierra, de Riotinto.
H.I
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